Resumen
La dinámica social de los últimos tiempos ha promovido la participación ciudadana en muchos aspectos de la vida política y cultural en nuestro país como parte de los derechos otorgados de acuerdo a las convenciones internacionales, y en otros casos bajo la presión social a partir de coyunturas donde el otorgamiento se convirtió más en una obligación antes que una causa justa. En ese contexto, la participación ciudadana puedo ser orientada a convertirse en un actor social que permitiera lograr objetivos de seguridad nacional a partir de una reacción razonable dentro de su ejercicio democrático y ciudadano, pero también un ejercicio responsable reduciendo factores que afecten la gobernabilidad y contributivos a la sostenibilidad democrática. Desde la perspectiva de la Política Nacional Multisectorial de Seguridad y Defensa Nacional al 2030, las causas directas del problema público, entre otros, incluye la carente cultura de seguridad, bajo involucramiento de las autoridades y los conflictos sociales. Dichas causas pueden ser reducidas desde la creación de un ciudadano responsable y funcional a los criterios de seguridad.